Hemos venido a jugar. Una simple frase que ultimamente la tengo grabada en mi mente a fuego. Ya no me pregunto ¿Porqué? Ahora mi pregunta es ¿Porque no?. Porque no correr hasta que te queme el pecho, tirarte a la piscina, sentir el vértigo o como todos los poros de tu cuerpo se erizan en respuesta el miedo.
Siempre he sido mucho de venga vamos. Porque no coger un tren hacia ninguna parte solamente por el placer de sentir que estas perdido. Beberme el ultimo gintonic a las 10 de la mañana. Joder, somos jóvenes. Y repito, estamos aquí para jugar.
Juegos oscuros, divertidos y locos. Jodidamente locos. Como cuando jugamos a, no te atreves?. No te atreves a desnudarte, a morderme el labio y a volverme loco. Claro que me atrevo. Y eso acojona. Ademas de verdad.
Tirarte desde el precipicio mas alto. Sentir el frio en tu cara.
Alguien me dijo una vez que ese no te atreves ocultaba una autodestrucción total. Y tal vez sea asi.
Autodestrucción como forma de levantarte cuando estas jodida, de continuar un camino aunque sabes que al final del mismo hay un precipicio. Porque joder, para ser feliz, hay que estar jodido.
Y mientras tu vives con tus miedos, yo voy a 200 km por hora.
sábado, 17 de enero de 2015
miércoles, 7 de enero de 2015
Por tí, rompia hasta los espejos.
Y aquí estoy, preguntándome si estoy hecha para la derrota. Por que jode.
Cuando decidí cambiar mi patrón, y enseñar mis cartas a la primera de cambio tu te marcaste un farol y sacaste escalera de color, por lo que quede fuera de la partida automaticamente.
Por primera vez en muchos años decidí dejarte ganar, porque pensé que tu victoria sería la victoria de los dos. Me tuviste donde quisiste, y de hecho, aún me tienes. Con mis defensas por los suelos y totalmente vulnerable. Y decidiste joderme, en el sentido literal de la palabra. Decidiste volverme loca, pisotearme y ponerme celosa.
Decidiste que no era suficiente como para arriesgarte.
Que no merecía la pena ni asomarse al precipicio simplemente por estos ojos azules. Que no tenia suficientes piernas y que mis curvas no merecían ser recorridas a 100 kilometros por hora. Que mi risa no era tu melodía predilecta. Ni mi cuello un lugar para perderte. Que mi compañía no valía ni tan siquiera las cervezas que compartíamos, y que la ciudad no era mas bonita a mi lado. Que los miles de planes que hicimos mientras la lluvia se deslizaba por nuestro rostro quedaron en eso, planes incompletos guardados en un cajón. Que los nervios dieron paso al hastío y que mis ganas chocaron con tu realidad.
Decidiste perder la cabeza por otras piernas, otra sonrisa y otro acento.
Cuando yo estaba allí, como una gilipollas. Dispuesta a todo. Por encima de todo. Dispuesta a recorrer el mundo, a cortar las ataduras, a volar libre. A pasar horas bebiendo cerveza y hablando sobre el mundo, a hablar en la cama sobre tu forma de ver la vida. En reirme de ti, en cantar contigo, emborracharme y bailar hasta el amanecer en los antros mas vacíos de las ciudad. En estar contigo,estaba dispuesta a romper hasta los espejos, y mira que da mala suerte.
Joder, es que me pierdo en tus ojos cuando me hablas.
Esos ojos que ya no me miran, y que cuando lo hacen están nublados. Ya no me miran brillantes, ahora me miran incomodos, con miedo . No se a que tienes miedo. No lo entiendo, durante un tiempo fuimos el par perfecto, iguales y a la vez totalmente opuestos. Pense que éramos química, que vivíamos en una realidad paralela cuando estábamos juntos. Pense que podría ser algo genial, como lo que dicen las canciones y las películas. Joder , estaba dispuesta a arriesgarme. Pero tu no.
Lo peor de todo querido cobarde? que no hay explicación y eso me mata por dentro. Me hace sentirme como una equilibrista borracha sobre la cuerda floja. Como cuando hay una accidente y no puedes quitar la vista.
Querido cobarde, yo me voy. Decidido queda. Cierro de un portazo. Vuelvo a los bares, a las noches y los gintonics. A los rollos de una noche, a los polvos sin quedarse a dormir. Porque por lo menos no hace daño, no confunde. Dicen que el amor duele. Pero yo no quiero mas. Se acabó. No vengas a buscarme porque ya no estaré aquí. Estare bailando bajo la luna, olvidándote a base de alcohol y tabaco.
Perdiste tu oportunidad.
Cuando decidí cambiar mi patrón, y enseñar mis cartas a la primera de cambio tu te marcaste un farol y sacaste escalera de color, por lo que quede fuera de la partida automaticamente.
Por primera vez en muchos años decidí dejarte ganar, porque pensé que tu victoria sería la victoria de los dos. Me tuviste donde quisiste, y de hecho, aún me tienes. Con mis defensas por los suelos y totalmente vulnerable. Y decidiste joderme, en el sentido literal de la palabra. Decidiste volverme loca, pisotearme y ponerme celosa.
Decidiste que no era suficiente como para arriesgarte.
Que no merecía la pena ni asomarse al precipicio simplemente por estos ojos azules. Que no tenia suficientes piernas y que mis curvas no merecían ser recorridas a 100 kilometros por hora. Que mi risa no era tu melodía predilecta. Ni mi cuello un lugar para perderte. Que mi compañía no valía ni tan siquiera las cervezas que compartíamos, y que la ciudad no era mas bonita a mi lado. Que los miles de planes que hicimos mientras la lluvia se deslizaba por nuestro rostro quedaron en eso, planes incompletos guardados en un cajón. Que los nervios dieron paso al hastío y que mis ganas chocaron con tu realidad.
Decidiste perder la cabeza por otras piernas, otra sonrisa y otro acento.
Cuando yo estaba allí, como una gilipollas. Dispuesta a todo. Por encima de todo. Dispuesta a recorrer el mundo, a cortar las ataduras, a volar libre. A pasar horas bebiendo cerveza y hablando sobre el mundo, a hablar en la cama sobre tu forma de ver la vida. En reirme de ti, en cantar contigo, emborracharme y bailar hasta el amanecer en los antros mas vacíos de las ciudad. En estar contigo,estaba dispuesta a romper hasta los espejos, y mira que da mala suerte.
Joder, es que me pierdo en tus ojos cuando me hablas.
Esos ojos que ya no me miran, y que cuando lo hacen están nublados. Ya no me miran brillantes, ahora me miran incomodos, con miedo . No se a que tienes miedo. No lo entiendo, durante un tiempo fuimos el par perfecto, iguales y a la vez totalmente opuestos. Pense que éramos química, que vivíamos en una realidad paralela cuando estábamos juntos. Pense que podría ser algo genial, como lo que dicen las canciones y las películas. Joder , estaba dispuesta a arriesgarme. Pero tu no.
Lo peor de todo querido cobarde? que no hay explicación y eso me mata por dentro. Me hace sentirme como una equilibrista borracha sobre la cuerda floja. Como cuando hay una accidente y no puedes quitar la vista.
Querido cobarde, yo me voy. Decidido queda. Cierro de un portazo. Vuelvo a los bares, a las noches y los gintonics. A los rollos de una noche, a los polvos sin quedarse a dormir. Porque por lo menos no hace daño, no confunde. Dicen que el amor duele. Pero yo no quiero mas. Se acabó. No vengas a buscarme porque ya no estaré aquí. Estare bailando bajo la luna, olvidándote a base de alcohol y tabaco.
Perdiste tu oportunidad.
Suscribirse a:
Comentarios (Atom)